- Las empresas que prioricen el aprendizaje continuo liderarán el mercado, ofreciendo soluciones adaptadas a cada industria.
Por Leonardo Borrero*
En un mundo donde las amenazas evolucionan y los riesgos se diversifican, el personal de vigilancia y seguridad privada enfrenta el reto de actualizar y especializar sus habilidades. La certificación inicial proporciona una base operativa, pero la verdadera diferencia radica en la especialización según cada línea de negocio. PROISO CONSULTORES ha identificado que la capacitación segmentada no solo mejora el desempeño, sino que fortalece la percepción de seguridad y confianza en el servicio prestado.
Más allá de la formación convencional
Las academias de formación en seguridad brindan entrenamiento certificado, pero este no es suficiente para responder a los riesgos específicos de sectores como el hospitalario, industrial, logístico o financiero. Es aquí donde entran en juego las técnicas de Reskilling y Upskilling.
- Reskilling (Recalificación): Capacitación en nuevas habilidades para asumir roles distintos. Ejemplo: un vigilante de control de accesos que recibe formación en defensa alimentaria, aprendiendo a identificar riesgos de contaminación, aplicar protocolos de bioseguridad y reforzar la seguridad en áreas críticas de producción.
- Upskilling (Mejora de habilidades): Perfeccionamiento de competencias existentes. Ejemplo: un vigilante hospitalario que se capacita en gestión de pacientes agresivos y protocolos de emergencia, desarrollando habilidades avanzadas en comunicación de crisis y manejo de situaciones de alto estrés sin comprometer la seguridad del entorno.
Beneficios de la especialización
- Diferenciación competitiva: Empresas con personal altamente capacitado ofrecen un valor agregado real.
- Reducción de riesgos: Mayor capacidad para identificar amenazas y responder eficazmente.
- Fidelización del cliente: Los clientes confían en empresas que entienden sus necesidades específicas.
- Optimización de costos: Equipos especializados operan con mayor autonomía y eficiencia.
- Mayor satisfacción del personal: La capacitación fomenta el crecimiento profesional y reduce la rotación.
Un claro ejemplo del impacto de la especialización ocurrió en Agrícola Himalaya, donde Proiso Consultores transformó la cultura de seguridad de la empresa. Los vigilantes, formados en seguridad física, no contaban con competencias en defensa alimentaria. Mediante un enfoque de aprendizaje experiencial y gamificación, que combinó teoría con simulaciones prácticas, lograron aplicar nuevas estrategias en inspección de carga, control de accesos y detección de riesgos en la producción.
El resultado: reducción de vulnerabilidades, mejora en la capacidad de respuesta y fortalecimiento de la seguridad en la planta, convirtiendo a la seguridad privada en un pilar clave dentro de la estrategia de inocuidad en toda su cadena de producción.
El alto costo de no especializarse
Si bien especializar al personal puede considerarse una inversión significativa, no hacerlo resulta aún más costoso, tanto en términos operativos como en la alta rotación del personal, lo que genera costos adicionales en procesos de selección, inducción y entrenamiento recurrente. Paradójicamente, el riesgo de especializar al personal es que estos se vuelvan más atractivos en el mercado y busquen nuevas oportunidades. Sin embargo, cuando los vigilantes sienten que encajan en su rol, que su labor es valorada y que tienen oportunidades de crecimiento dentro de la empresa, es más probable que permanezcan en la organización, reduciendo así la fuga de talento y fortaleciendo la cultura organizacional.
Un caso que lo ejemplifica ocurrió en un hospital donde un vigilante, sin formación en seguridad hospitalaria, no supo manejar una contingencia en la madrugada. En una unidad de urgencias, un paciente psiquiátrico en estado crítico se tornó violento, intentando agredir al personal de salud y dañar el mobiliario. El vigilante, sin formación en manejo de crisis hospitalarias ni protocolos de contención de pacientes agresivos, reaccionó de forma incorrecta: en lugar de aplicar técnicas de intervención seguras, utilizó fuerza desmedida, lo que derivó en una lesión grave del paciente y una demanda contra el hospital.
La falta de entrenamiento no solo afectó la operatividad del hospital, sino que generó costos legales, reputacionales y operativos. Además, la rotación del personal de seguridad en la institución aumentó, ya que los vigilantes asignados a la unidad, al no contar con el entrenamiento adecuado, preferían abandonar el cargo antes que enfrentarse a situaciones que no estaban preparados para manejar. En contraste, en entornos donde los vigilantes han recibido una formación especializada y saben exactamente cómo actuar en situaciones críticas, se sienten más seguros en su puesto, comprometidos con su labor y con menos intención de abandonar la empresa.
En conclusión, la seguridad privada no puede depender de una formación genérica. Adoptar estrategias de Reskilling y Upskilling, junto con una segmentación precisa del conocimiento, es la clave para fortalecer las competencias del personal y elevar la calidad del servicio.
Las empresas que prioricen el aprendizaje continuo liderarán el mercado, ofreciendo soluciones adaptadas a cada industria. Proiso Consultores ha demostrado que la especialización y el aprendizaje experiencial generan un impacto positivo en la seguridad y la continuidad del negocio. La seguridad no es estática: evoluciona, y con ella deben evolucionar quienes la ejercen.
*Leonardo Barrero, Especialista en administración de la seguridad Seguridad Magister en administración de cadenas de suministro.
